Quedémonos con las vísperas

La próxima vez que os escriba, queridos soñadores, yo habré acabado de aterrizar de mi sueño. Tendré aún el olor a azahar en los poros de mi piel y esa imagen que me hizo emocionarme grabada en la retina. Ahora la Gloria llega, y nuestra Mancha se engalana para recibir a Dios y a su bendita Madre. Da gusto pasear por nuestras calles, y respirar ese ambiente que tanto nos gusta, porque por fin, en esta tierra esta época del año no pasa desapercibida, y aunque nos quieran quitar los crucifijos, para esto estamos los cristianos, para proclamar nuestra Fe por el mundo, y sentirnos orgullosos de ella.

Gracias a las grandes familias de cofrades en nuestra tierra, cómo los Pajaron, podemos ver nuestra Plaza Mayor engalanada con numerosos banderines y reposteros, y gracias a varias de nuestras hermandades, podemos disfrutar de ver muchas de nuestras calles y placitas vestidas para la ocasión. Hoy Ciudad Real respira a cofradías por los cuatro costados.

Vienen días de emociones, de sentimientos, de auténtica hermandad con los que más queremos. Ojalá esta sea tan buena semana santa como la del año pasado, bueno mejor, sin que el cielo llore, y la disfrutemos todos juntos.

Espero ver a mi hermana antes de irme, pero si no, Soraya, esperame el miércoles santo con todas tus aventuras por África bajo el brazo, que ya es hora, ¿no? jejeje.

Bueno, soñadores, desearos una feliz Semana Santa, que la disfrutéis y la viváis intensamente, que es una vez al año, y olvidaros de rencores, de aguas pasadas, y a vivir el sueño.

Hasta la vuelta.

Sueños

Anoche soñé de nuevo
Con su túnica morada
Saliendo desde San Pedro
Pintando una bella estampa.

Anoche yo tuve un sueño
Que me pareció tan real
Era Jesús Nazareno
Con valiente caminar.

Con mi Jesús Nazareno
El de la túnica morá
El que sale desde San Pedro
El Señor de la Ciudad

Entre cirios de un cortejo
Se abría paso el Señor
Y con firme racheo
Venía caminando Dios.

En una marabunta de gente
Se hacía latente su Pasión
Y venía andando de frente
Por un pasaje de amor.

Entre sones de Reyes
Jesús se hacía Salvador
En un monte de claveles
A los pies del Redentor.

A la Gloria de la Mancha
Quedó rendida la ciudad
Por semblante, una esperanza
De una nueva madrugá.

Por racheo, su zancada
Por paso, su seriedad
Anoche yo tuve un sueño
Y hoy vuelvo a soñar.

Preparativos

Ya ha pasado un año desde aquel día en el que el cielo lloró, y la ilusión se duplica. Son horas de nerviosos, de sonrisas, de preparativos... Horas en las que sólo tenemos una cosa en la cabeza, que no es otra que todo salga bien, que el trabajo de un año vea sus frutos.

Señor, hoy tu Ciudad se tiñe de morao para recibirte. Los dulces aromas a incienso empiezan a embriagarnos en las calles, y hasta las ilusiones florecen con más fuerza que nunca. Todo esta listo, la hora se acerca, y Tú, esperando silente y quieto. Ya no volverás a subir al retablo de tu capilla hasta que todo se haya cumplido. Tus ojos aguardan ese momento, en el que sereno, como siempre, cargas con la cruz de nuestros pecados.

Mucha es la ilusión, muchos los nervios, larga se ha hecho la espera, pero... Ya está aquí. Ahora sólo nos queda disfrutar de la noche más mágica del año, en la que pondremos a tus pies cientos de besos en forma de clavel.

Todos por igual, valiente. ¡A esta es!

Tu si que eres MISERICORDIA

Porque tu si que sabes de obras de Misericordia. Porque creo que cuando empezaste a salir con la túnica, sandalias y callao, con sólo 5 añitos, no imaginabas que llevarías tan lejos el nombre y la obra de nuestra Madre. Porque nos haces darnos cuenta a los demás de lo minúsculos de nuestros problemas.

Hoy echo de menos tu sonrisa, nuestras charlas hasta altas horas de la madrugada, el brillo de tus ojos contandome con entusiasmo la historia de aquel paciente, de aquella vez que cogiste el bisturí, o la ilusión que desprendes en todos tus actos.

Tu entusiasmo aporta energía a nuestras vidas, y seguro que la mejor medicina para aquellos niños es tu alegría. Me siento orgullosa de ti, y se que esta experiencia te va a aportar mucho y te va a hacer crecer como persona (aun más)

Gracias por ser tan GRANDE. Gracias por tu MISERICORDIA INFINITA, y gracias por ser mi hermana. Te quiero.

A los pies del Amor

A los pies del Amor

la vida resurge de nuevo

a los pies de un redentor

que un día bajó del cielo.

A los pies de la agonía

hoy renace un sentimiento

que sin Remedio un día

se fue en callado silencio.

A los pies de una cruz

hoy me rindo de nuevo

por amor, por su luz

por lo que se llevó el viento.

A los pies de un calvario

de una amargura que llora

de un pañuelo que es sagrario

de una lágrima que brota.

A tus pies yo me rindo, Señor

por ser tu mi guía

por enseñarme que el Amor

es la lección de cada día.

Por eso, a tus pies,

hoy proclamo rendida

que Tú eres Señor mi Fe

mi esperanza y mi vida.