Mi letra pudiste acariciar

Y de nuevo, vuelvo a soñarte. Tu sonrisa de medio lao, tu mirada de pillo, tu pelito moreno… Casi puedo olerte y ver el brillo de tus ojos.
Y es que la aventura que comenzó hace 21 años, hoy sigue su rumbo, su camino hacia ti. Era solo una niña cuando te descubrí, sin saber muy bien por qué me regalaban aquella cinta de casete de un chico guapo en la portada. La puse en mi walkman azul, y desde ese instante, verano del 92, no pude dejar de escuchar aquella dulce voz. Recuerdo las lágrimas de mi prima María, por entonces con sólo 3 años, cada vez que escuchaba Se le apagó la luz. Aún hoy, sigue llorando con ella y emocionándose contigo mientras ve cómo en su vientre crece una nueva vida.

Kilómetros, horas de espera, impaciencia, ilusión… Un gazpacho de emociones cada vez que te siento cerca. Cada vez que me subo al tren de un nuevo disco, cuando elijo en qué vagón sentarme y veo los que me acompañan en cada viaje. Algunos, pasajeros que se bajaran en la siguiente estación, pues sólo están de paso en el tren. Otros, compartirán mi viaje para siempre. Sin duda, todos serán inolvidables, con los que compartiré momentos mágicos, de ilusión, de sonrisas, de lágrimas…

Y una de esas pasajeras que un día se sentó a mi lado en el vagón y que espero no se baje nunca, es mi amiga Olga, que hoy comparte el paraíso conmigo. Tantas horas hablando de ti, abrazos intensos al final de un concierto, risas nerviosas esperando en la cola de un concierto, horas de sol, de agotamiento, de esperanza…

Cómo esa esperanza que nos mantiene vivos, ¿verdad? Eso me dijiste hace muy poco. Esa esperanza que me hace hoy llenar mi maleta de ilusión por tenerte cerca, por sentir un abrazo tuyo, por poder darte los regalos que te llevamos con tanta ilusión.

Pop Art para un Artista del Pop, que paradoja… jeje. Y es que inspirarse en grandes artistas cómo Roy Lichestein o Andy Warhol a la vez que escucho tu música, no me ha costado mucho. Queríamos algo original, y bueno, esperamos que te guste, aunque hay que salvar las distancias con los grandes dibujantes y artistas, aquí te aporto mi granito de arena, para que sepas que eres GRANDE en nuestras vidas. No se si te lo podremos dar personalmente, pero nos haría tanta ilusión que te hicieras una foto con los regalos… Al menos para saber que están en tus manos.

Y es que mi vida, no la concibo ya sin ti. Sin escuchar tu voz, sin ver tu cara, sin saber de ti… Cada vez que vas a sacar un disco, que vas a salir en tv, mi móvil echa humo a base de mensajes y llamadas de amigos y familiares diciéndome: “Tu Alejandro hace esto” Y es que eres eso, “Mi Ale”, mi niño, mi sueño, mi esperanza… El que está cuando me siento sola, el que me hace reír, llorar, emocionarme, desahogarme, soñar, ilusionarme………… SENTIR. Mantenerme viva con más ilusión que cuando tenía 11 años y te escuché por primera vez. Hoy a mis 30 vuelvo a sentirme niña cada vez que siento que ya estás cerca.

Tu primo David, por cierto, una persona genial, me confirma lo que ya veía en ti y me hacía sentirme orgullosa, y es tu humildad. Tu disponibilidad para ayudar siempre a los que lo necesitan, tu amor por la familia, por los tuyos. Tú aunque no lo sepas, formas parte de la mía.

Incluso he contagiado a mi novio de mi locura y es el primero en las tiendas de discos cada vez que sacas uno nuevo, me pone tu voz en el coche, me acompaña a estar cerca de ti…

Y es que para los míos, el ir a verte desde tan lejos cómo haré este fin de semana en Alcalá de los Gazules, ha pasado de ser una locura, a ser algo normal. Cómo te dije, formas parte de mi vida desde hace mucho tiempo.
Aún me parece haber soñado que un día me hablaste desde un coche, en una autovía. Que me miraste y me sonreíste y me pediste que te hiciera una foto. Menos mal que Olga estuvo rápida, porque a mí me temblaba el pulso, las piernas, y hasta el corazón. Si no fuera por esa foto, creo que seguiría sin creérmelo, jejeje.

Me alegra tanto que compartas cada día con nosotros, a través de la red… Conectarse y saber que estás al otro lado, que quieres, de alguna forma, compartir tu vida con todos los que te queremos, es algo maravilloso. Hace unos años, impensable, y ahora solo hay que hacer un click para sentirte un poquito más cerca. GRACIAS por ser así, por compartir tanto, por esa humildad que es lo que cada día te hace más GRANDE.

No tendría vidas suficientes para agradecerte tanto, ni palabras con las que expresarlo, ni folios dónde plasmarlo, pero aquí te dejo un pedacito de mi, un puñao de sentimientos en forma de carta, una esperanza aferrada a un cachito de ilusión, una fe que se convierte en magia cuando te siento cerca.

Querido Ale, te quiero y lo haré mientras viva. Gracias por tantos años compartidos, por tanto sentimiento. Gracias por regalarme el paraíso, por poner ese tren en mi estación y por exponer al aire tu alma. Gracias por ser como eres, aunque inalcanzable, yo te siento cercano. Para mi eres mucho más que un artista, que un cantante, que una estrella… Eres mi estrella, la que me acompaña allá dónde voy, la que guía mi camino.

Y de nuevo, volveré a soñarte…