La Familia

Amor, cariño, ilusión... Son las palabras que me salen al ver estas fotografías. Porque no hay nada más bonito que la VIDA, que el poder querer y dar tu cariño. Y es que a veces no sabemos lo afortunados que somos de tener a nuestras familias cerca, de poder dar un beso o un abrazo, de sentir el calor de los nuestros...

Alberto, ahora eres muy pequeño, pero estoy segura de que ya sientes todo esto que digo, de que tú también nos quieres dar tu cariño, y hacernos sentir esa ilusión al ver tu sonrisa.

OS QUIERO.

Deja que tus sueños...

Me niego a quedarme con ese sinsabor que tenemos desde hace días. Hay que pensar en positivo y sacar todo lo bueno que hemos vivido, que ha sido mucho. Y que hemos compartido. Por todos vosotros, que me hacéis sentir la ilusión cada día, por los que aparecéis en las fotos y por los que no, por los que habéis compartido conmigo las risas y las lágrimas, por tantos momentos...

GRACIAS

El Resumen

Impacientes esperábamos tu llegada. Saboreando los últimos pedazos de esas vísperas tan soñadas, tan llenas de magia mientras la cuenta atrás ya era ineludible. Casi no queríamos que se marcharan esos días, pero casi sin darnos cuenta, se nos fueron de las manos, entre sueños cumplidos, anhelos y plegarias para que el cielo estuviera radiante.

Pero no pudo ser. Empezó el sueño en un domingo de magia, de largas calles de adoquines y de esperas, de capirotes que querían rozar el cielo. Y nos sumergimos en él, esperando vivir lo soñado. Nos Despojamos de la rabia y nos llenamos de Amor. Entre palmas y olivos nos pareció ver una Esperanza. Los Ángeles también te soñaron con túnica blanca, trayendo Salud al mundo. Y así, cómo te había imaginado, compartiste conmigo tu Buena Muerte, tras esa Cena en la que la Amargura ya era fiel presagio.

Amaneció un lunes vestido de Redención, de beso traidor y de Rocío. Iban pasando las horas, entre el traslado de tu cuerpo inerte, y las Penas que se convertían en Tristezas para desembocar en un río cargado de Aguas...

Y a partir de ahí, Aguas derramadas que no tuvieron Misericordia, ni entendieron de Amor, ni de Piedad, ni de Consuelo... Sólo dejaron Dolor a su paso.

Dolor de no haberte podido disfrutar más, de no haberte podido ayudar a cargar con tu cruz. Dolor de ver cómo sin darnos cuenta se nos ha escapado de las manos otro año más, en el que los sueños fueron tan bonitos que no se pudieron hacer realidad... o quizás si. Dolor de que hasta el cielo no haya podido dejar de llorar en tantos días, ahogándonos con sus Penas, con su Amargura, y dejandonos una Soledad que no es fácil de comprender.

Y ahora...Comienza de nuevo la espera de la espera. El tiempo de gozo llega algo vacío esta vez, con el sinsabor de no creernos que haya pasado. Con la incertidumbre de no saber lo que vendrá. Con ilusiones mojadas que intentan secarse y reponerse rápido para poder de nuevo volver a SOÑAR.

Que me digan que no fue un sueño

Que me digan que no fue un sueño

lo que aquella tarde sentí

entre nubes de Fé e incienso

lo que en un pasaje viví

entre el clamor de mi pueblo.

Que me digan que no he soñado

ver la Fe bajo un madero

entre bamboleos morados

entre plegarias y anhelos.

Y si es verdad que fue un sueño

no me quiero despertar

quiero dormirme de nuevo

que me dejen de nuevo soñar

Con la Gloria de San Pedro

con una Plaza que es Piedad

con un Prado que es el cielo

con forma de Catedral.

Y si hablamos de soñar

tenemos que hablar del Pasaje

donde la Gloria pisamos

y sueño lo que soñaste.

Que me digan que no fue un sueño

que no lo he imaginado

que despertarme no quiero

que quiero seguir soñando.

Y si de este sueño despierto

que sea de nuevo a tu lado

contigo, Jesús Nazareno

quiero vivir lo soñado.

La noche de los claveles

Cada año con más ilusión, con más ganas, con más cariño...Este año faltará Ella mirandote desde la reja, esperandote al llegar, serás Tú quien la espere a Ella, quién aguarde bajo un manto rojo de claveles su llegada.

Y ahora si que ha comenzado todo, es el culmen de las vísperas. Otra bendita cuaresma que empieza a escapársenos de las manos, para dar lugar al fruto de un año de esfuerzos, ilusiones, trabajo...

Esta noche, volverá a encenderse la ventanita de San Pedro hasta altas horas. Y por Ti, a tus pies, se forjará la magia de otro año lleno de sueños.

SIEMPRE A TUS PIES, PADRE NAZARENO.

Parece que es la hora...

Ya llega el momento. Todo está preparado, y nosotros dispuestos a compartir tu PASIÓN en un domingo que marca el comienzo de todo. Cómo si el tiempo no pasara, otro año más nos disponemos a tratarte con mimo, a poner caricias a tus pies en forma de clavel rojo, a compartir contigo la noche más esperada del año. Llenos de ilusión, cómo cada año. Siempre igual pero distinto.

Pabilero del Amor

COFRADE. Para mi, de esas personas que luchan y trabajan por nuestra Semana Santa, que se alegran de los bienes de los demás y se entristecen con sus penas. Que siempre está dispuesta a echar una mano, que sabe escuchar, y dejarse aconsejar. Además de todas estas cualidades, es BUENA PERSONA, que es la principal cualidad no sólo para ser un buen cofrade, si no para ser un gran cristiano, que es más importante aún. No todos pueden decir lo mismo, ni siquiera algunos que por su cercanía al Santísimo deberían PREDICAR con el ejemplo.

Pero tenemos la suerte de que en nuestra Civita Regia haya COFRADES Y BUENAS PERSONAS cómo Gonzalo, el Pabilero del Amor. Porque Amor es lo que desprende hacia los que tenemos la suerte de considerarnos sus AMIGOS.

La Cuaresma de los Sueños

Con prudencia y tranquilidad, pero con una inevitable alegría, saboreo la noticia que hace tanto que esperaba: Mi querida Misericordia, procesionará, por fin, bajo palio, cómo debe hacerlo la Madre de Dios.

He aprendido que cuando la llama de la esperanza está practicamente apagada, siempre queda algún resquicio que la hace volver a brillar y resplanceder. Tantos años de lucha, tantas lágrimas, tantos disgustos... hoy van viendo su fruto, 26 años después. Y es que al final, todos tenemos que seguir un camino, y darnos cuenta de que estamos aquí por la misma razón: ELLA. Que todo tiene su rumbo, y que no vale la pena salirse de el.

Hoy creo estar soñando, y ya la imagino, con la LUZ de la cera, bajo su palio, saliendo por la puerta del Sol en la mañana del Viernes Santo... Ojalá pronto sea una realidad.

La primavera floreció este año, en forma de azahar, de Amor y de mucha ilusión.

El pregón de los grandes olvidados

Fotografía: Miguel Barba

Porque era tu voz, pero este pregón tenía un nombre propio, y tu lo dejaste claro...

Porque ya era hora de que se subieran al atril del quijano hermandades que también lo merecían.

Porque ha sido el pregón de TODOS y para todos.

Porque nunca ese atril derramó tanto sentimiento.

Porque sólo un buen cofrade cómo tú, pero sobretodo, una BUENA PERSONA es capaz de hacer aflorar así las emociones de todo el mundo.

Por acordarte de todos siempre.

Y por la ilusión que le pones a esto tras tantos años, digna de admirar.

ENHORABUENA, PREGONERO.

Mañana...

Creo que nunca he esperado un pregón con tanta ilusión. Tal vez porque sé, a ciencia cierta, y afirmo sin temor a equivocarme, que será mucho más que un pregón. Quizás por esa sensibilidad y emoción que desprendes y que siempre has sabido transmitir a todos los que te rodeamos. Tal vez porque eres el único capaz de hacer aflorar los sentimientos en los momentos más difíciles, sin dar voces, tocando la fibra sensible. Porque para mi, sólo hay un capataz, y eres tú. Porque fuiste quien "me enseñaste a ser cofrade" y compartimos tantos momentos buenos que han hecho olvidar los malos. O tal vez porque un día cogiste a un grupo de chavales jóvenes, que nada sabían de esta locura, y les llevaste de la mano a conocer aquella ciudad mágica de la que tan buenos recuerdos conservo, a conocer otras queridas hermandades que tú llevas también en el corazón y enseñarnos, con paciencia el engranaje de una hermandad.

Recuerdo aquella época cómo una de las mejores de mi vida, llena de ilusión. Aquellas noches en la casa hermandad de la Flagelación, de la Santa Cena o de la Dolorosa, compartiendo tanto con tantos amigos que seguro que mañana te acompañaran en tu día grande. Y por supuesto, recuerdo cada ensayo, cada palabra de ánimo y cada momento. Aquellos viajes a ver bandas, aquellas juntas, asambleas... Algunas más difíciles de lo que habríamos podido imaginar.

Y cómo olvidar aquel año, con mi pierna escayolada, tus palabras al acercarte a darme una flor suya...

Pero no es momento de nostalgias, aunque seguramente mañana lo sea. Es el momento de desearte toda la suerte del mundo, aunque ya se que no hace falta. Mañana pregonarás todo el Amor que llevas dentro a través de la Misericordia y la Bondad. Será, cuando oficialmente, comience un año más, nuestra primavera.

El gran teatro espera impaciente, con sus butacas aún vacías de público, pero llenas de espectación, de ilusión. La magia fluye entre ellas y en el ambiente se presiente que mañana será un día para el recuerdo, para la historia.

Se que mañana será el pregón soñado. El pregón de los grandes olvidados, NUESTRO PREGÓN.

SUERTE, PREGONERO