De nuevo la llamada de lo esencial. Del interior y la sencillez. De lo espiritual y lo transcendental. De nuevo la Fe llama a la puerta, la Cruz empieza a pesar y el hábito a prepararse.
Y este año siento diferente esa llamada. Más distante, más fría. Creo que me costará más abrir la puerta. En mi interior sigo dándole vueltas a aquello a lo que no encuentro respuestas, sigo echando de menos, sigo sin entender...Pero también, albergando una pequeña Esperanza.
Otra vez comienza la espera, los aromas de incienso, el brillo de la plata. Empieza a desperezarse el clavel y el azahar florecerá de nuevo...
Y me pregunto si mi ilusión también florecerá de nuevo, si el pellizco que sentí esta mañana fue de verdad o solamente pasajero...
2 comentarios:
Ojala, ojala y ese rebrinco de tu corazón sea la señal que te haga ver y sentir que debes de estar ahí, de una u otra manera, en uno u otro sitio, pero ahí, aportando experiencia, saber y gusto, trabajo bien hecho y del que tanto se adolece en muchos sitios...Feliz y renovadora Cuaresma
Me uno a las palabras de Magdaleno...
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