Los hay que sólo saben ver sombras dónde brilla la LUZ
Los que ven enemigos a los que sólo quieren tender una mano
Los que son incapaces de ver las flores que nacen a sus pies, y en cambio, se empeñan en marchitarlas o pisarlas.
Y los peores, los que se alegran del mal ajeno, del mal de nuestra semana santa. Los que se dan golpes de pecho y se hacen llamar cofrades cuando ni siquiera son buenas personas. Los que se piensan que son alguien por un carguillo de tres al cuarto, y precisamente, lo que menos hacen es representar a nadie. Pero no hablemos de eso hoy, porque luego somos muy susceptibles.
Ciudad Real ha perdido, y yo no me alegro. Me quedo con el orgullo de tener amigos VALIENTES, BUENAS PERSONAS, CULTOS E ÍNTEGROS. No todo el mundo puede decir lo mismo.
5 comentarios:
BRAVO!
No se podía decir más claro ni más bonito.
Un fuerte abrazo
Es una pena que en esta ciudad no se sepa apreciar el valor humano que tenemos alrededor muchas veces.
Me quito el sombrero ante esta entrada Sonia!
cuantas verdades juntas... aunque por desgracia alguno que otro no lo va a entender
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