En la sencillez está el gusto. Durante este mes, en la capilla de Jesús Nazareno, se hará más presente que nunca el Dolor. María, siempre al pie de la cruz, llora por los que se fueron y presiente el sufrimiento del que con mirada serena y templada, le mira desde el retablo. Y así, sencilla, despojada de toda joya, se nos presenta en este mes nuestra bendita Madre de Misericordia.
La Niña se hizo Madre y en su corazón siente el fuerte puñal del Dolor...
1 comentario:
Siente ese puñal de dolor, pero también el bálsamo reparador a la espera certera y segura de la mañana del tercer día...
Espléndida!
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