martes, 31 de mayo de 2011

La elegancia de un Mayo que se nos va





Elegancia y clase. Esas son las palabras que describen el estado actual de mi querida Misericordia. Una elegancia de la que apenas hemos podido disfrutar en su mes, el mes de María. Por eso este mayo ha sido tan raro, casi sin oler a primavera, cómo si estuviera vacío o le faltara algo.

Pronto la LUZ que desprenden sus ojos volverá a inundar la capilla de la que durante tantos meses se ha ausentado. La veremos de nuevo a los pies de su hijo, consolando a todo aquel que se acerca a Ella y volverá la primavera vestida de luz, de pureza, de dulzura.

Por eso hoy, último día del mes florido, mi entrada va para Ella, la flor más bonita de cualquier jardín.

3 comentarios:

Mada dijo...

Ha sido una pena no poder disfrutar de su belleza, de su elegancia y de su dulce expresión de Niña guapa...Espero poder acercarme pronto a Ella, en su capilla , junto a su Hijo y hablarle de las cosas, de nuestras cosas...

Á dijo...

Ole las madres guapas!!! Está preciosa!

La_Crivi dijo...

¿Verdad que si? Espero que no tardemos mucho más en poder disfrutar de Ella cómo es debido, que cada vez que pienso en lo grande que es San Pedro y que tenga que estar en una habitación de dentro... ainsss