sábado, 14 de abril de 2012

Y la Luz se hizo


Fotografías: Javier Regaña

Y de qué manera se hizo presente, por fin, en mi hermandad. El rostro reflejaba de nuevo la juventud de una ilusión renovada, de sueños cumplidos y anhelos alcanzados. Aires nuevos con aromas a jazmín y rosa, con esencia de buen gusto y de un camino que se empieza a abrir, como se abrió la puerta ojival a las 12 del mediodía para que la Misericordia se paseara por esa Civita Regia que tanto la quiere.

Niña que madura entre el cariño, ofrendas que se consumen a sus pies, promesas prendidas de su saya...Y la quiero como el primer día. Hasta el más pequeño de mi familia ya está aprendiendo a quererla. Ese sentimiento de juventud eterna que se renueva.

La quiero, y Ella lo sabe. Me espera cada pocos días tras la reja, y me cuenta, y yo le cuento. La miraba desde mi antifaz y el tiempo se detenía. Capaz de unirnos a todos, capaz de convocarnos con su llamada y sentir que latimos por un mismo corazón. Juventud a la que nos trajeron de la mano nuestras abuelas, a las que nunca se les hará mayor su alma, ni su corazón.

Y no fue un Viernes Santo más, pues la Luz brilló como nunca lo había hecho. Las ofrendas pudieron consumirse y el sentimiento recuperar su ilusión perdida. No fue perfecto, lo sabe Ella y lo se yo. Pero el camino por fin tiene un rumbo, una meta a la que llegar. 

Los sueños se cumplen...Y yo quiero seguir soñando.


Fotografía: Ángel Ureña

No hay comentarios: