martes, 20 de marzo de 2012

Parece que es la hora...

Y no es la hora


Las papeletas de sitio aún aguardan vírgenes, impacientes por ser rellenadas. Las estampas que se repartirán, el reloj que quiere y no quiere avanzar. La vieja medalla a la que sacamos brillo otro año más...Todo espera las últimas horas. El ritual comienza de nuevo entre el movimiento de una casa hermandad en la que estos días el desorden reina entre la magia y la ilusión nueva. Segundo día de la semana de Dios, las vísperas rozan su fin, y se empieza a saborear la gloria cuando los aromas del incensario se perciben desde el viejo pozo de Don Gil. 

Parece que es la hora...Y no es la hora

2 comentarios:

Mada dijo...

Esa magia, esa ansiada espera, la agonía de las horas que gracias a cofrades como tú siguen teniendo y conservando ese pellizco en el corazón que las hace ser nuevas e inusitadas cada año....
Enhorabuena y tu Pasión es la de muchos

La_Crivi dijo...

Es la magia de la espera, de sentir que aunque todo se repita, es nuevo cada año. Es el nerviosismo, la ilusión... Y ya no queda nada!